El Monte-Carlo Bay Hotel & Resort se publicita como el hotel capaz de ofrecer una experiencia novedosa en un destino de leyenda. Y no dudamos de la certeza de este eslogan. Y todo empieza por su ubicación, en una exclusiva península del Mediterráneo, a un paso de la Reserva Marina de Larvotto. ¿Se puede pedir más? Pues sí, aún hay más. Es una estupenda opción para alojarse en Montecarlo, ya que está cerca del paseo marítimo, dispone de piscinas al aire libre para aprovechar los 300 días de sol al año, habitaciones de encanto exclusivo y un restaurante delante del mar.
En 2015, este hotel cumplió su décimo aniversario. Responde a un concepto mucho más complejo que el de un simple establecimiento hotelero. El Monte-Carlo Bay Hotel & Resort es casi un club privado para el alojamiento y el disfrute del entorno, con 4 hectáreas de jardín, actividades de ocio y espectáculos.
Pertenece al Monte-Carlo Société des Bains de Mer y respeta el espíritu relajado, placentero, lujoso y auténtico de la marca. Ofrece una combinación perfecta de estilo mediterráneo y tropical, siempre elegante y dirigido al relax y bienestar de los clientes. Así, presenta cascadas, piscinas cubiertas y exteriores, una laguna turquesa con arena en sus profundidades y maravillosas vistas de la Costa Azul. Esta laguna tiene más de 100 metros y es única en toda Europa por sus terrazas y zonas de baño en medio de la naturaleza.
El hotel tiene una arquitectura neoclásica, con soportales y columnas, ideal para estancias vacacionales o de negocios. Tiene más de 300 habitaciones, suites y duplex, todos ellos muy espaciosos y agradables, que incluyen terraza exterior y decoración de lujo.
Pero, si hablamos de gastronomía, el Monte-Carlo Bay Hotel & Resort dispone de varios restaurantes de gama alta, con grandes muestras culinarias. Por un lado, el Blue Party, con capacidad para 250 comensales, y el Las Brisas, para otros 150 clientes, son la principal oferta en época estival. Ambos ofrecen cocina mediterránea y sabores de todo el mundo.
Mientras, también tenemos la opción de comer algo ligero o rápido en Il Baretto, el favorito de conocidos comensales noctámbulos. Y, por último, el Blue Gin, es una opción más chic e informal, con amplia terraza con vistas al Mediterráneo, cuyo plato fuerte es la carta de combinados y la programación musical de última tendencia.
También hay que destacar su Spa 5 Mundos, con piscina interior y una oferta basada en el disfrute de los sentidos. Decoración monumental, tradiciones antiguas de culto y cuidado del cuerpo y trato ceremonial, son sus símbolos distintivos. Casi 1.000 metros cuadrados dedicados al cuerpo y el alma, con una docena de espacios privados, baño turco y club fitness.
Resumiendo, el Monte-Carlo Bay Hotel & Resort ofrece a sus huéspedes 334 habitaciones, 22 de las cuales son suites. 10 salones para eventos que pueden distribuirse en módulos y salas que ofrecen espacios de hasta 365 metros cuadrados. También tiene una cafetería con preciosas vistas y terraza, el Blue Gin, y otros cuatro restaurantes durante la temporada alta de verano. Para la salud y belleza, su oferta se concentra en el Spa Cinco Mundos, al que hay hay que sumarle un gimnasio, una piscina cubierta y una laguna con fondo de arena, un salón de belleza y diversas tiendas de lujo. Sus clientes tienen acceso directo al Casino Bahía y a la discoteca Jimmy’z.
Cabe destacar que el compromiso de la dirección del hotel, con varios proyectos relacionados con el cuidado del medio ambiente. Por un lado, se comprometen con un desarrollo sostenible y obtuvieron la certificación de Green Globe en el año 2013. Por otro lado, colaboran activamente en la recuperación y conservación del caballito de mar, una especia protegida en la Reserva de Larvotto, donde su ubica el hotel. Este animal marino es la mascota del establecimiento desde hace una década y colabora activamente en su recuperación.
Los comentarios de los clientes en páginas de reconocido prestigio como Tripadvisor lo califican mayoritariamente en las categorías de Excelente o Muy Bueno. En estas opiniones ponen de relieve aspectos como la amplitud y el buen gusto de las habitaciones, la buena atención del personal del hotel y la piscina con fondo de arena. Por otro lado, destacan su excepcional ubicación, cerca de todos los lugares de interés de Montecarlo.