El Hotel Columbus Montecarlo es un establecimiento de lujo, de 4 estrellas ubicado al oeste de Mónaco, concretamente en el nuevo distrito de Fontvielle. Su primer propietario fue el piloto de Fórmula 1 David Coulthard y se inauguró en 2001 en un acto presidido por el Príncipe Rainiero. En 2010 el corredor se lo vendió al grupo London and Regional, quien lo ha convertido en uno de los mejores establecimientos de la Riviera Francesa.
El hotel lo diseñó Amanda Rosa, partiendo del color azul como base de todo su interiorismo y completando la decoración con muebles naturales, piezas de cuero, y materiales como la madera, el mármol y la piedra. Actualmente, dispone de más de 170 habitaciones y una veintena de suites.
El Hotel Columbus está ubicado en una área residencial de Montecarlo, y se constituye como una opción magnífica de alojamiento en un destino lleno de glamour, famosos, lujo, juego y deportes de élite. Tienes vistas maravillosas al puerto y al Mediterráneo y se encuentra muy cerca de diversos atractivos turísticos. Además, para los amantes de los deportes de invierno, conviene destacar que está a sólo 90 minutos en coche de las pistas de esquí Isola 2000.
Si usted viene a Montecarlo con la intención de disfrutar de una estancia para recordar, este hotel puede ser la mejor opción. Dispone de restaurante, gimnasio, piscina exterior para disfrutar de los 300 días de sol que tienen al año y unas instalaciones completas, cómodas, modernas y útiles. Tanto para estancias privadas como para viajes de negocios, ya que está muy cerca de la zona financiera del Principado. Es un hotel, sobre todo, polivalente.
Sus 180 habitaciones disponen de servicios extra, como aire acondicionado y servicio de bar, además de televisión por satélite, caja fuerte, y teléfono. Como cualquier hotel de categoría, el Columbus de Montecarlo agasaja sus huéspedes con una buena provisión de artículos de higiene y amenities. Concretamente, las suites son muy amplias, lujosas, con zonas comunes independientes para propiciar la vida familiar o de grupo.
Eso, dentro de las habitaciones. Fuera hay un montón de instalaciones dedicadas al ocio, al deporte, a la salud y al bienestar. Este es el caso de una piscina descubierta, un gimnasio y una piscina interior para el invierno. Y un servicios adicional de transporte público, para desplazarse por el centro de Montecarlo.
Si hablamos de gastronomía y restauración, el hotel dispone de un restaurante para realizar cualquier comida del día y un servicio de habitaciones con horario preestablecido. Además, ofrece a sus huéspedes un bar donde tomar un refresco o tentempié a cualquier hora del día.
Si tu estancia responde a un viaje de trabajo, aprovecha los servicios que el Hotel Columbus pone a tu disposición: desde limusina con chófer hasta sala y aparatos para proyecciones audiovisuales, pasando por salas de conferencia, espacios para reuniones, áreas de entrevistas personalizadas y zona de recepción para grupos. También está disponible para los clientes el servicio de traslado de ida y vuelta al aeropuerto, con su tarifa correspondiente.
Si consultas las opiniones vertidas por los clientes en diferentes foros, todos coinciden en destacar la bonita estética del hotel y sus maravillosas vistas. Algunas también poden de relieve la buena relación calidad-precio, para el nivel económico habitual de Montecarlo. Y, si hablamos de las quejas o aspectos negativos, sólo se habla de molestias provocadas por el servicio de limpieza a primera hora del día o algún fallo puntual en el servicio de habitaciones.
Es decir, que el Hotel Columbus puede resultar la manera perfecta de disfrutar del exquisito y lujoso nivel de vida de Montecarlo, a un precio asequible. Muchas webs lo describen como un establecimiento sofisticado que ofrece una estancia vibrante y llena de lujos. Un hotel rodeado de un espectacular acantilado, vistas a la rosaleda de la Princesa Gracia y con el Mediterráneo como fondo. ¿Sugerente, no?
Este hotel se ubica en unos terrenos ganados al mar, incluidos dentro del diseño urbanístico que llevó a cabo el Príncipe Rainiero. Está próximo a una zona industrial, pero también rodeado de zonas verdes y construcciones elegantes y srefinadas. El Casino de Mónaco se encuentra a cierta distancia, por lo que habrá que desplazarse en transporte público o privado.