Las dos grandes tendencias universales de la joyería, sin enemigos temporales ni transitorios, son sin duda las propuestas en oro y en plata. Sea cual sea el momento o la moda de la temporada estos dos conceptos triunfan siempre en los looks más casual con pequeñas cadenas o en los outfits más elegantes para aderezar un gran vestido. Eso sí, siempre hay una de las dos opciones que será tu apuesta más segura, ¿debes apostar por el dorado o por el plateado?
Aunque las épocas de fiesta como la navidad son las más propicias para los brillos y para experimentar con la bisutería, las joyas elaboradas con oro y plata sobreviven a las necesidades de etiqueta y extienden su efecto a todo el año. Estos elementos serán posibles para los momentos importantes de etiqueta pero también serán un acierto en los outfits del día a día.
Para estos eventos de invierno parece que el cuerpo nos pide unas tonalidades plata más acordes con las decoraciones propias de los climas fríos y la sensibilidad que puede aportar a un fino vestido de nochevieja, aunque en verano siempre invade una cálida sensación marcada por el efecto del sol que hace más propicio el uso del oro. Parece difícil decidirse.
Más allá de la época del año, ¿dorado o plateado?
Aunque la temporalidad puede ser un indicativo de cómo preparar ciertos looks o qué joya escoger en algún momento determinado, lo cierto es que de tu paleta de colores personal dependerá el estilo más conveniente para ti entre otras cosas.
No es algo sencillo conocer cuales son los colores más favorecedores en cada caso, y habitualmente será una cuestión de expertos el evaluar la gama de tonalidades más acorde a cada tipo de rasgos. A pesar de ello existen ciertos indicativos relativamente comunes que pueden indicar por donde van los tiros, como que una persona rubia nos pedirá una tendencia al uso de dorados de manera casi inconsciente. Una buena manera de evaluarlo es acercar los accesorios al rostro ante un espejo y comprobar con qué material tienes un aspecto más favorecedor.
No mezcles brillos y escoge los colores
Algo importante a la hora de elaborar un look es decantarse por ciertas tonalidades y respetarlas, así que ya sea en plateados o en dorados escoge y hazlo hasta el final de las consecuencias ya que las mezclas no suelen dar buenos resultados. Todos los accesorios que lleves en la gama escogida deben respectarla y crear cierta uniformidad para no caer en el mal gusto.
Los accesorios contrastarán también con el color escogido para la ropa, así que prueba si la plata o el oro contrastan bien y llaman la atención sobre los colores para combinar de manera infalible todos los elementos que vas a llevar.
Respetando la paleta personal y lo mejor para tus rasgos
Una vez eres consciente de tu paleta personal y las gamas más favorecedoras trata de respetarlas, de manera que si lo tuyo es el oro seguramente las prendas cálidas te irán mejor. Si has comprobado que la plata va más con tus rasgos es muy posible que los colores fríos te queden mejor y puedas combinar ropa de tonalidades azules o verdes con bonitos accesorios planeados con mucho éxito.
Si no eres capaz de decirdirte o no ves clara tu tendencia más favorecedora y adecuada no dudes en consultar con profesionales expertos, ya que te ayudarán a determinar tus mejores facetas y te resultará más sencillo adquirir nuevos elementos una vez conozcas bien cual es tu paleta personal.
Los expertos en imagen personal o belleza sabrán evaluar tu situación de una manera objetiva y profesional, una inversión que te servirá para toda la vida ya que además de ayudarte a escoger entre plata y oro te servirá para determinar los colores y formas de absolutamente todos los looks y prendas para siempre.
En definitiva, un pequeño análisis de tus propios rasgos bastará para decantarte por las joyas de oro o las joyas de plata, y una vez realizado, nunca debes olvidar crear los outfits con coherencia de tonos sacando el mejor provecho a tus puntos fuertes y utilizando la bisutería para hacerte brillar.